Esta página intenta ser un espacio multicultural donde todas las personas con inquietudes artísticas, en cualquier terreno que sea puedan publicar sus creaciones en forma libre y sin ningún tipo de censura. Son bienvenidas todas las muestras de las bellas artes que los lectores del blog nos quieran acercar. El único criterio válido es el de la expresividad, y todo aquél que desee mostrar sus aptitudes no tendrá ningún tipo de censura previa, reparos o correcciones. Este espacio pretende solamente ser un canal más donde los artistas de todas las latitudes de nuestra Iberoamérica puedan expresarse. Todas las colaboraciones serán recibidas ya sea en nuestro correo todaslasartes.argentina@gmail.com o bien en nuestra página en facebook denominada "Todas Las Artes Argentina" (Ir a http://www.facebook.com/profile.php?id=100001343757063). Tambièn pueden hacerse amigos de nuestra Página en Facebook yendo a https://www.facebook.com/pages/Todas-Las-Artes-Argentina/249871715069929

jueves, 21 de marzo de 2013

DECEPCION ©, por Carlos Alejandro Nahas, de Buenos Aires, Argentina



A cierta gente uno le perdona todo,
Todo, todo.
Absolutamente todo.

Desde lo más abyecto a lo más siniestro,
Pueden estar en medio de una violación, asaltando un banco,
Jugando a la ruleta rusa, estafando a un niño en la calle…
Le perdona todo


Son pocas, contadas con los dedos de la mano
Nos hacen cagadas, una, otra, nos decepcionan,
Y uno les perdona todo, todo

Porque sabe que detrás de eso viene el gesto increíble,
La mayor de las patriadas
La charla confidente
El mate a tiempo justo
Y uno les perdona todo

Porque uno no puede enojarse con esa gente, porque sabe que son pocos
Y que cada día que pasa uno se pone más viejo, menos sabio, más sólo
Y presiente que le queda poca gente que lo quiera con el alma,
Que le perdone todo, que le escuche todo
Que esté de parte de uno cuando todos se dan vuelta
Que luche espalda con espalda contra los malos,
Y uno les perdona todo

Hay momentos, pocos en la vida
Donde se abre una puerta
Se ensayan disculpas, todo es vergüenza
Y uno se pone peor que el otro

Y uno desearía no haber nacido
No haber pronunciado nunca esas palabras
No haber dicho, no haber hecho, nada
Pero uno…. Qué se le va a hacer
le perdona todo.

Pasa, como pasa todo,
El tiempo cura todas las heridas dicen,
Mientras tanto, la garra de la noche te atenaza y te toma por el cuello
Y el sueño no viene pensando en esa cagada
Meditando cuándo podrá ser el día nuevamente en que tengas ganas
Reales ganas de volver a tomar un café sin prisa

Mientras tanto la tristeza te toma de rehén, te sacude la moral
Te pide a gritos no haber estado allí,
Te implora volver el reloj atrás y que ese día no existiese
Y se instala como una losa en el pecho
Y te aprieta y te carcome
Y te despiertas en medio de la noche, sudoroso
Pensando en lo que viste, tratando de que nunca hubiese pasado

Tomará un tiempo, tal vez breve, tal vez largo
Seré carne de diván miles de tardes más
Las charlas volverán
El dolor dará paso al olvido,
Porque en definitiva, lo que importa, lo sublime de todo esto
Es que a esas personas,
Sin las cuales uno ni imagina la vida sin ellos,
En el fondo, con el alma descarnada
Les perdona todo.



6 comentarios:

  1. Muy bueno, pero muy perturbador.
    Sos un escritor excelente, pero no podrías interpretar a nadie de la serie "Los simuladores"
    Mamá

    ResponderEliminar
  2. No logro entender este poema,Carlos. Concuerdo con que no hay cosa más gratificante que el perdón pero...perdón desinteresado, no perdón que busca ser recompensado en la vejez. Jamás perdonaría a un violador , por tomar uno de tus ejemplos, que lo perdone DIOS, yo no podría, puedo perdonar que me hieran pero si se hace costumbre, pues, amigo, todo tiene un límite y el mío es "DIOS TE BENDIGA PERO TE QUITO DE MI FRECUENCIA AÚRICA" Creo, es mi humilde opinión, que no está bien perdonar TODO, ABSOLUTAMENTE TODO. Perdón si interpreté mal tus versos.

    ResponderEliminar
  3. Gracias Myriam por tus palabras. En realidad este es un poema escrito por quien sabe de prosa pero nada de poesía, y está dedicado a un ser muy querido mío, al cual le perdono todo. Pero es mi humilde percepción de las cosas y está bien que otros opinen diferente. Un abrazo cálido. Carlos

    ResponderEliminar
  4. Lo que acontece, ante esos seres tan necesarios, no es el perdón sino la comprensión. Cuando puede uno ponerse en los zapatos del otro de verdad y entender que puesto en la misma situación uno lo habría hecho igual o no, mejor o no, peor o no, entonces uno está haciendo carne del sentir del otro, está siendo el otro y llegando a un entendimiento profundo y sanador. Perdonar, no existe. No somos dignos de perdonar a un semejante, porque perdonar implica haber hecho un juicio previo. Y ningún hombre, por su condición humana falible, errática, imperfecta, está tan limpio de corazón y espíritu como para juzgar a su hermano. Entender, dejar fluir, amar al prójimo por encima de mis/sus propias imperfecciones. Hasta ahí me animo. Gracias por el espacio para dejar esta opinión. Saludos desde algún lugar del vasto universo.

    ResponderEliminar
  5. Nunca palabras tan justas y sentidas. Muchas gracias. Carlos

    ResponderEliminar